miércoles, 24 de julio de 2013

Taller de cereales, horno de adobe y pan de centeno

Esta semana no os traigo receta, ando como muchos de vosotros en verano, medio liados, medio perdidos... pero no quería quedarme sin compartir una experiencia muy especial. 

Hace dos años por estas fechas estuve en un pueblo palentino llamado Arenillas de San Pelayo impartiendo un taller de restauración de muebles, dentro de las actividades que organizaron Escuelas Campesinas de Palencia en la IV Universidad Rural de Verano. El año pasado tuve la suerte de que volvieran a contar conmigo para impartir un taller de cremas y jabones naturales, y parece que no hay dos sin tres porque este año he vuelto a tener la suerte de que confiaran de nuevo en mi, encargándome el taller de Cereales, el cual incluye también enseñar a hacer pan.

pan de centeno

Al principio no sabía muy bien cómo conseguiría organizarme para enseñar a 15 personas a hacer pan, y a la vez explicarles contenidos teóricos acerca de los cereales y del proceso de panificación. Además, se sumaba el hecho de que me tocaría cocer los panes en un horno que nunca antes había usado, y si con el horno de casa nunca sabes con qué sorpresa te puedes encontrar, con un horno como este, de adobe, mayor incógnita.

horno de adobe

Aún no he terminado el taller, acabaremos el viernes, pero por el momento la experiencia no podía haber sido mejor. La verdad es que muchas veces es mejor no planificar las cosas en exceso, sobre todo cuando hay factores que no se pueden controlar porque no dependen de uno mismo. Sobre la marcha es como mejor se toman las decisiones en función de lo que nos vamos encontrando. Y así, la jornada de ayer, fue simplemente perfecta, al menos para mi.

pan de centeno

Pensé que para el primer día lo mejor sería hacer un pan de centeno e hicimos una receta sencilla de pan 100 % de centeno, con masa madre y un poco de levadura. Un pan que fermentó muy bien y que conseguimos meter al horno justo en el momento en que éste estaba a la temperatura adecuada. Tuve muy buena ayuda a la hora de encender y controlar el horno, y la verdad es que con mis ayudantes fogoneros conseguimos que el horno se comportara mejor que bien. El resultado podéis verlo en las fotos que pude sacar y que debido a las prisas y a la emoción del momento no son todo lo buenas que me hubiera gustado, ¡pero que importa eso cuando el pan había salido tan bien!

horno de adobe con pan de centeno
pan de centeno

Estoy emocionada con este horno, ¡es una pasada!, ¡cómo funciona!. La verdad es que el resultado es espectacular, nada que ver con el horno de casa, al menos con el mío, que es bastante normalillo. 

pan de centeno

Este es un horno es bastante nuevecito, casi se puede decir que lo hemos estrenado nosotros, porque sólo se habia encendido antes una vez, un poco de prueba, para ver qué tal tiraba. Fue construido hace dos años, en otro curso que organizó también Escuelas Campesinas de "Técnicas y Materiales Tradicionales en la Construcción". En este curso, que me hubiera gustado hacer como alumna pero no pude, se enseñaron técnicas de construcción tradicionales con barro madera y cal, aprendieron a hacer adobes, a construir con ellos y a rebocar muros con barro.

pan de centeno
pan de centeno

Como veis son talleres todos ellos relacionados con los saberes populares, que de esta manera se intentan recuperar y que no caigan en el olvido. A mi me parece una iniciativa estupenda, porque este tipo de cosas siempre me han interesado y me siguen interesando. De hecho ahora mismo estoy en proceso de aprender otro de esos saberes de antaño, pero de momento no os voy a desvelar nada más...

Y a vosotros, ¿os interesan este tipo de talleres? ¿habeís recuperado del olvido alguna de estas sabidurías populares?

miércoles, 17 de julio de 2013

Tarta con piruletas de chocolate para una fiesta

Hace poco fue el cumpleaños de Carla, la niña de mi amiga Mariu. Entonces, a la hora de preparar su fiesta se dio cuenta de que se le escapaban un montón de detalles, y se le ocurrió que, al igual que hicimos con la menta, quizás podríamos preparar todos los detalles para una fiesta en equipo.

tarta de chocolate con piruletas

Da igual el tipo de fiesta, de cumpleaños, fiesta del verano, ¡lo que sea!, lo importante es que en un momento determinado, con motivo de cualquier celebración, podamos encontrar cómo hacer las invitaciones, unos banderines, unos farolillos, o incluso una tarta.

tarta de chocolate con piruletas

Para las invitaciones y banderines, Rocío ha preparado una entrada perfecta con descargables gratuitos, Begoña ha preparado la decoración floral, Ana nos trae una historia muy especial de las suyas, Anna ha hecho unos farolillos para velas que os recomiendo que no os perdáis, y Mariu nos propone ideas para una fiesta de helados.

Y por supuesto, de la tarta me encargo yo, que para esta ocasión os traigo una tarta que me encanta, porque es muy sencilla de hacer y muy rica, y también, para que nos vamos a engañar, es  supercalórica, pero por un día ¡qué más da!. Esta tarta la he hecho más de una vez en los cumples de mis niños y es un éxito total. El chocolate pocas veces falla, pero las piruletas de chocolate no os podéis hacer ni idea, ¡duran menos que un caramelo a la puerta de un colegio!. Y de remate tiene una cobertura que yo la primera vez que la hice me quedé encantada, es crujiente, de chocolate y le da el toque perfecto.

tarta de chocolate con piruletas

Y sin más preámbulos, aquí os la dejo:

tarta de chocolate con piruletas

Ingredientes:

220 g harina de repostería tamizada
200 g mantequilla a punto pomada
4 huevos (mejor a temperatura ambiente)
240 g azúcar
100 ml de nata
3 cucharadas (tbsp) de cacao en polvo (tamizado)
1 cucharada de levadura química
una cucharadita (teaspoon) de extracto de vainilla 
Para la cobertura:
70 g chocolate de cobertura
70 g azúcar
agua
Para las piruletas:
100 g chocolate negro
100 g chocolate blanco
palitos

- batimos la mantequilla con el azúcar y cuando haya blanqueado añadimos también los huevos, de uno en uno
- sobre el batido anterior añadimos poco a poco la harina, la levadura y el cacao. Por último añadimos la nata y el extracto de vainilla y mezclamos bien.
- engrasamos un molde, añadimos la masa y metemos al horno, precalentado a 180ºC durante unos 50 minutos. Cuando lo saquemos del horno dejamos que se enfríe sobre una rejilla
- para la cobertura añadimos en un cazo el azúcar y sobre este algo de agua, en la receta original, que saqué de la revista Casa 10 indicaban 100 ml, pero es mucho. Con que se cubra el azúcar y se deshaga en el agua es suficiente. Lo ponemos a calentar, y cuando el azúcar ya esté deshecho, y antes de que se empiece a dorar y convertir en caramelo, añadimos el chocolate troceado. Lo apartamos del fuego y lo tapamos dejándolo reposar un par de minutos. Pasado ese tiempo mezclamos un poco y lo añadimos sobre la tarta antes de que solidifique.
- y para las piruletas sólo hay que fundir los chocolates al baño María y después formar pequeños círculos con ayuda de una cuchara sobre un trozo de papel de hornear. Colocamos el palito y lo metemos al frigorífico para que se solidifique de nuevo el chocolate. Por último pinchamos las piruletas en la tarta

tarta de chocolate con piruletas
tarta de chocolate con piruletas

martes, 9 de julio de 2013

Gargantilla de ganchillo, de lino

Últimamente me da por hacer pequeñas joyas de ganchillo. Hasta ahora había empleado un hilo plateado, y la verdad es que queda precioso.

Pero para la última gargantilla que me he hecho he escogido un hilo de lino. Es del número 30, así que he usado un ganchillo muy fino, del número 11. ¡Ahora que está de moda el ganchillo XXL , a mi me da por hacer también ganchillo XXS!. 


Cuando vi esta gargantilla  me quedé absolutamente prendada de ella. Como podéis ver está hecha con un hilo bastante más gordo pero a mi me gusta como me ha quedado con este hilo más fino.

gargantilla de ganchillo

Para colgarla hice una cadeneta con dos hebras, y sobre esta tejí otra cadeneta más a punto enano para que aumentara un poco su grosor. Después en los extremos enrollé sobre sí la cadeneta y la cosí haciendo un pequeño círculo, sobre el que apliqué un automático de plástico transparente, que no se aprecia bien en la foto, pero que sirve para atar la gargantilla.

Además, para darle un poco más de cuerpo, he metido un pequeño hilo de alambre alrededor de cada círculo por el lado del revés y que va entrelazado entre los pilares.

¿Qué os parece? ¡A ver si no se le antoja a nadie, por que la última cosa que hice se la tuve que regalar a mi hermana pequeña!

lunes, 8 de julio de 2013

Polos de yogur de horchata

Algunos recuerdos de la niñez se graban en la memoria y perduran para siempre. Por fortuna suelen ser los mejores recuerdos, porque nuestro cerebro, gracias a Dios, tiene mecanismos de defensa que hacen que los malos recuerdos se nos olviden o que con el paso del tiempo no parezcan tan malos. Imagino que si tuviéramos acumulados en la memoria todos los malos recuerdos que hemos vivido nuestra vida sería terrible.

polo de yogur de horchata

Pero en fin, dejemos lo malo de lado, que ya viene sin que lo busquemos, y vayamos a lo bueno. Uno de los mejores recuerdos que tengo de cuando era niña es de cuando tenía 7 años. Ese verano lo pasamos en Alcira, en casa de una hermana de mi madre. Todos los días íbamos a la playa. Recuerdo ir a coger piñones, subir con mis hermanos a jugar en la azotea mientras mi madre y mi tía tendían la ropa, las duchas que nos daban a mis hermanos y a mi cuando volvíamos de la playa, éramos 4 a duchar y entrábamos en serie. Recuerdo también cómo mi madre y mi tía aprovechaban el sol que pegaba en la azotea para hacer yogures dentro de una cazuela. Montones de pequeños momentos que me llevan al pasado y me provocan una sonrisa.


polo de yogur de horchata

Y entre todas esas cosas que me traen sentimientos agradables se encuentran los polos de horchata. Muchas tardes nos compraban un polo de horchata, ¡qué rico! desde entonces no lo he vuelto a probar, porque donde yo vivo hasta es raro encontrar horchata en los bares, así que en forma de polos aún menos. Era un polo corriente, de esos de hielo; naranja, limón y horchata, de los más baratillos, pero con un sabor a horchata increíble. Me acuerdo de que costaba exactamente dos pesetas. Esa era la propina que me daban a mi los domingos en aquella época: dos pesetas. Pero es que de esto que os hablo hace muuucho, muuucho tiempo, fue en el siglo pasado, antes de que muriera Franco, así que echad cuentas...

polo de yogur de horchata

Pues después de tanto tiempo he querido volver a tomar uno de esos polos de horchata, y aunque no es el mismo, sí está tan rico como aquel. Es rápido y fácil de hacer. Fresquito, rico... no necesita heladera ni moldes especiales si no los tenéis, porque la gracia de este polo es precisamente que es de los "de hielo", así que ¡qué más da que cristalice! Y como molde: ¡un vaso!, que nos sirve además para meter el polo entre chupada y chupada y así, si se nos deshace muy rápido por el calor, lo que nos cae al vaso lo podemos beber después. ¡No me negaréis que no es una receta bien aprovechada eh!

polo de yogur de horchata

Y vosotros, ¿qué recuerdos especiales tenéis de cuando erais pequeños? Seguro que también tenéis un montón y espero que os hayáis acordado de algunos y que paséis con ellos un ratillo agradable.

¡A la receta!

Ingredientes:

100 g chufas hidratadas
2 yogures griegos
100 g azúcar
250 g agua
palos para polos
canela

- ponemos a remojar las chufas con agua la noche anterior
- una vez que se han remojado las escurrimos, añadimos 150 g de agua y las trituramos con una batidora (yo empleé una de vaso) hasta que quede una pasta fina
- escurrimos esa pasta con un lienzo para extraer todo el jugo de las chufas y sobre las chufas escurridas añadimos otros otros 100 g de agua , removemos un poco y volvemos a colar con el lienzo. Después añadimos el azúcar, los yogures y una pizca de canela (muy poca)
- mezclamos bien todo para homogeneizar y repartimos la mezcla en vasitos, colocando un palo para agarrar el polo
- metemos al congelador

polo de yogur de horchata

Sugerencias:

- mejor tomarlos al día siguiente de su preparación
- para que el palo se quedara más o menos centrado, tapé con papel de aluminio los vasitos e hice una pequeña ranura en el centro por la que coloque el susodicho palito
- si os gusta la horchata seguro que también os gustará mi receta de horchata con información sobre las chufas
- hace muuchos años encontraba en el supermercado del corte inglés un concentrado de chufas, que quienes vivís en alguna ciudad podéis buscar, seguro que con el os salen unos polos riquísimos y os ahorráis un paso, aunque la verdad es que no sé si aún lo siguen vendiendo ni tampoco su marca, pero por si acaso podéis intentar buscarlo, sin volveros locos claro.
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